sábado, 23 de noviembre de 2013

Equidistante

Me gusta ser oído
para tu voz en secreto
que anuncia tu amor en mi espina
como corriente.
Inesperado
como la vida;
no se espanta de un alma plomiza,
y me quiere desértica,
inconstante e incompleta.
Me gusta la equidistancia de tu mano a la mía;
me gusta mi nombre en tu boca
porque se llena de pájaros.
Misterio doloroso
pintor, poeta y apóstol
través de ti amo todo lo humano,
al mundo con su chirrido
de rutina oxidada
y a tu perfil a contraluz
rompiendo lo cotidiano.


L. Alison Ramos M.